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El año va llegando a su fin y desde Tambre hemos querido recopilar algunos de los testimonios que nuestros pacientes han protagonizado durante estos meses y que tanta valentía, tesón y esperanza desprenden.
Nuestro propósito es hacerte feliz y nuestra felicidad, conseguirlo. Por ello, siempre queremos compartir contigo toda historia que pueda animarte a embarcarte también en el apasionante proyecto de tener un bebé.
Freddie, Evie y Sophie: tres tesoros Tambre
Este 2023 hemos tenido el placer de contar las historias de 3 pacientes provenientes de Reino Unido, cuya experiencia en su país no había sido del todo positiva. Lo que tienen en común las narrativas de Nicola (la madre de Freddie), Victoria -que tuvo gracias a Tambre a su hija Evie – y Yoko (y su marido Jon), padres de Sophie; es que hacen hincapié en la comunicación fluida con nuestro equipo y su poliglotismo, la excelencia en la calidad de los procesos que llevamos a cabo y la personalización de nuestros tratamientos.
Yoko, Jon y su bebé Sophie.
En estas tres historias de Fecundación in Vitro, Tambre emerge más que como una mera clínica, como un refugio de esperanza, profesionalidad y atención personalizada. La dedicación de la clínica para abordar las necesidades individuales, la comunicación efectiva y el acompañamiento continuo han hecho posible que los sueños de nuestros pacientes hoy tengan nombre propio.
Pacientes concienciados con el paso del tiempo
Verónica y Alberto son una joven pareja que también ha confiado en nosotros para llevar a cabo un tratamiento de Fecundación in Vitro. A pesar de estar viviendo aún los pasos iniciales del tratamiento, ya se han percatado de la importancia de haber recibido una información detallada y rigurosa por parte de su especialista, la Dra. Estefanía Moreno. Valoran asimismo el ambiente tranquilo de Tambre a la par que la cálida atención recibida por sus coordinadoras, Mónica y Cristina. La pareja expresaba, al contar su historia, su necesidad de romper el tabú existente en torno a la infertilidad, alentando a otros a confiar en nuestros expertos y enfatizando la importancia de la edad a la hora de hablar de reproducción.
Estefanía y Alberto junto a la doctora Estefanía Moreno.
Por otro lado, nuestra clínica no solo es conocida por ofrecer tratamientos que amplíen tu familia, sino que también ha ayudado a infinidad de mujeres que aún no han tomado una decisión respecto a su maternidad. Hoy día las mujeres tienen a su primer hijo mucho más cerca de cumplir los 40 años, momento en el que la reserva ovárica de la mujer ha mermado considerablemente y los riesgos asociados a la edad materna avanzada aparecen.
Independientemente de si la duda en lo que a querer tener descendencia se refiere nace de razones personales, sociales o laborales, resulta primordial contar con la posibilidad de tener un bebé sano. En este contexto Tambre creó TEMPO, un programa innovador de tratamientos de preservación de la fertilidad que destaca por priorizar las necesidades individuales de cada mujer, entender sus circunstancias y brindarles información sobre el proceso y las opciones futuras.
Mercedes y la decisión de congelar sus óvulos
Este es el caso de Mercedes, quien, a sus 32 años, optó a principios de año por vitrificar sus ovocitos con nosotros, impulsada por la recomendación de una conocida y el trato acogedor del equipo. Destaca la cercanía y confianza que experimentó durante el proceso y alienta a otras mujeres a informarse sobre la posibilidad de postergar la maternidad y a hacerlo en Tambre.
Raquel, Hernán y su sueño
Todas las historias de nuestros pacientes son especiales. Y queremos finalizar recordando la de Raquel y Hernán, pacientes que ya se encuentran viviendo la última etapa de embarazo. Durante el testimonio que nos dejaron compartiendo la experiencia de su tratamiento de FIV, solo tenían palabras de gratitud hacia Tambre y hacia la experta que llevó su caso, la Dra. Paloma Sánchez-Gómez.
Después de varios intentos fallidos para concebir, eligieron quedarse a nuestro lado por el trato y cuidado recibidos y la confianza que sintieron. Gracias a esta decisión, ahora la pareja está esperando a su bebé, el cual, según el médico que realizó las primeras ecografías, mueve tanto los brazos, ¡que podría llegar a ser bailador de flamenco!
Historias de emoción llenas de vida
Son varios los factores que unen todas las historias, y una común a la mayoría de sus protagonistas es que se pusieron en nuestras manos después de haber experimentado una o varias experiencias negativas en otras clínicas.
Esto sitúa a Tambre como una clínica referente, de segunda opinión, donde acuden los pacientes que piensan que nadie más puede brindarles la buena noticia que tanto tiempo llevan esperando. Nuestro centro, gracias a los test y tecnologías con los que contamos y a las últimas técnicas disponibles en el sector, tiene la capacidad de ofrecer tratamientos de calidad con el principal objetivo de cumplir los anhelos de nuestros pacientes.
Estamos deseando crear más historias maravillosas en el año venidero. ¿Y tú? ¿quieres ser protagonista de una de ellas? Tenemos muchas ganas de conocerte y hacer de tu vida un relato que tenga el mejor de los finales.
